15 de marzo de 2011

Queso fresco casero

Este es el último experimento que nos ha salido bien y que hemos decidido publicar.
No es común que se tenga acceso a leche recién ordeñada, y menos aún que uno se dedique a hacer queso fresco, pero hemos ido probando y, una vez cogida la medida, decidido publicarlo por si alguien se decide.
Es un proceso sencillo, pero como todo en esta vida tiene sus pasos, que hay que seguir.
Se puede usar leche cruda, pero no es aconsejable a menos que se tengan buenas condiciones ambientales y se proceda a la maduración del queso durante 60 dias o mas (no encontrareis en el mercado quesos poco curados elaborados con leche sin pasteurizar). Con ello nos aseguraremos de que no existe riesgo de contaminación por brucella.
Aqui os dejo la ayuda para que podais proceder a la pasteurización de la leche
Os pongo la medida para seis litros de leche que es lo que venimos usando.
Sale un queso de 1,2 kilos, más o menos. La última vez salió de 1.250 gramos.
Necesitamos:
  • 6 litros de leche fresca
  • sal
  • cuajo
El cuajo lo podéis encontrar en las farmacias, la cantidad a poner según el fabricante es de una cucharilla pequeña de café para cuajar de 40 a 60 litros de leche. El cuajo correspondiente a la medida de una cucharilla moka es de unos 5 gramos por lo que necesitaremos menos de un gramo de cuajo.
Si no teneis una balanza de precisión, coger una cucharilla con cuajo, ponerla sobre papel aluminio, hacer como una línea y dividirla en cinco partes cogiendo una de ellas.
Después de pasteurizar la leche conviene introducir la olla en un barreño lleno de agua fría, o en el fregadero para que la leche se enfríe con más rápidez.
Mientras se enfría, mezclar el cuajo con una cantidad de sal igual y una tacita de café de agua mineral. Dejarlo reposar a temperatura ambiente.
El cuajo hace su efecto cuando la leche está a 37º C, la temperatura corporal. Por lo tanto dejaremos que la leche se enfríe hasta llegar a 38º C, vertemos el cuajo en la leche, poco a poco (parece una tontería, pero no lo es), removiendo la leche suavemente pero sin parar.
Ahora hay que coger la olla y envolverla en una manta para que se mantenga el calor durante el cuajado de la leche (una hora). El tiempo no es exacto, en un día caluroso de verano el cuajado será más rápido. Una buena solución es poner la olla en el horno precalentado a 45ºC, poner dentro la olla y apagar el horno, sólo queremos que se mantenga la temperatura.
Transcurrida una hora, quitar la manta, y comprobar el estado de la leche. Si ha cuajado bien veremos que se ha separado parte del suero y que este líquido tiene un color un poco verdoso. Hacer unos cortes en la leche cuajada con un cuchillo, espátula o algo parecido y dejarlo reposar unos 15 minutos a temperatura ambiente.
Pasada esa media hora, romper el cuajo con el mango de una cuchara, un palo fino de madera o cualquier utensilio parecido hasta que los trozos de leche cuajada queden del tamaño de un grano de maiz. Mientras se agita todo, poner una cucharada sopera de sal, tener en cuenta que la mayoría de la sal se irá con el suero.
Ahora hay que proceder a separar la leche cuajada del suero que se habrá formado. La mejor forma de hacerlo es sacando el suero de la cazuela.
Yo uso una espumadera, un colador grande y un cucharón sopero. Meto el colador en la olla donde está la lecha cuajada, dejando que se separe el suero y sacándolo con el cazo o cucharón.
Agenciaros un molde cuadrado o circular (yo he cogido un envase normal de la cocina y le he cortado el fondo), ponerlo en un plato o fuente llana y llenar el interior con el queso, poniendo capas y apretando ligeramente, se irá escurriendo poco a poco el suero que queda.
Poner un poco de sal por encima para que quede a vuestro gusto.
Ponerlo en el frigorífico durante unas horas y tendréis un excelente queso.
Está mucho mejor si se deja reposar un par de días.

Pasteurizar la leche

No es normal que se tenga acceso a leche recién ordeñada y hay que tener algún amigo o conocido que se dedique a la cría de ganado para obtenerla.
En mi caso tengo esa suerte y puedo disponer de leche con garantía sanitaria porque la salud de las vacas es excelente.
Para aquellos que podais conseguir leche pero con cierta desconfianza o preferís quitarle gérmenes antes de su uso, os aconsejo que procedais a una pasteurización que es un proceso largo y a baja temperatura para no perjudicar las cualidades naturales del producto.
Para ello vais a necesitar de una olla con capacidad suficiente, una espátula de silicona, plástico o acero y un termómetro con escala superior a 65º C.
El proceso es el de llevar la temperatura de la leche a 65º C y mantenerla durante media hora, con ello habremos reducido al mínimo la cantidad de los microorganismos que pueda contener. Hacedlo al principio con fuego moderado y después mantener el fuego en su mínima expresión.
Un consejo, antes de verter la leche en la olla, conviene enjuagarla con agua, nos evitará que la leche que está en contacto con el fondo de la olla se pueda quemar.

20 de febrero de 2011

Pastel de manzana con miel

Con los ingredientes que os ponemos sale una tarta para seis u ocho personas.
Se hace bien en un molde de unos 26 o 28 cm de diámetro
Ingredientes:
  • Tres manzanas golden o reineta, al gusto.
  • 120 gramos de azúcar
  • 3 cucharadas soperas de miel
  • 125 gramos de margarina
  • 230 gramos de harina
  • 2 huevos y una yema
  • 10 galletas maría
  • 1 cucharadita de te de levadura Royal o similar
  • 2 cucharadas soperas de brandy
  • canela al gusto (1 cucharada moka rasa para empezar)
Triturar las galletas ayudándonos de un rodillo.
Cubrir con las galletas el fondo del molde que vayamos a usar.
Pelar las manzanas, cortarlas a dados. Si son muy dulces, añadir una cucharada de zumo de limón. Añadir la canela y mezclar bien.
Repartir los dados de manzana cortada por encima de la galleta triturada.
En un bol mezclar bien azúcar, miel y margarina. Añadir los dos huevos enteros y la yema adicional y batir bien.
Poner el brandy y mezclarlo.
Tamizar la harina junto con la levadura, añadir a lo que tenemos en el bol y mezclar bien.
Echar la masa encima de las manzanas, repartirla y poner al horno precalentado a 160º, durante 60 minutos, más o menos. Comprobar con un palillo de madera el grado de cocción antes de apagar el horno.
Cuando esté frío decorar con azúcar glas.
Buen provecho.

8 de febrero de 2011

Coordenadas GPS campings

www.orangecamping.es

Creo que no hará falta que diga que soy campista.
Me gusta ese mundo y disfruto de mis vacaciones como nadie.
A veces echo de menos una buena base de datos con las situaciones de los campings que, afortunadamente, están lejos de carreteras principales y los podemos encontrar en sitios variopintos y con mucho encanto.
Para aquellos que echais de menos lo mismo que yo, os aconsejo visitar la web http://www.archiescampings.eu/spa1/ es la mejor base de datos que he podido encontrar con campings de toda Europa.

17 de enero de 2011

Mermelada de naranja 2

Visto el precio en el campo de las naranjas, y que la temporada ha sido caótica para el productor, o sea para mí, me he decidido a hacer unos cuantos kilos de mermelada intentando medir las cantidades y controlar las temperaturas de ebullición para poder hacer siempre la misma mermelada.
Para ello he contado con unos kilos de naranjas navelinas recién cortadas del árbol, sin tratamientos fitosanitarios en los últimos seis meses por lo que lo único que tenían era un poco de polvo.
Los ingredientes eran los que detallo:
  • Naranjas
  • Azúcar
Además he necesitado un termómetro de cocina.
La proporción ha sido, 1 kilo de pulpa de naranja limpia, 800 gramos de azúcar.
Primero hay que sacar la parte naranja de la piel de la mitad de las naranjas, cortar esta piel en juliana y poner en abundante agua fría. Ir cambiando el agua regularmente durante 24 horas.
Pelar muy bien las naranjas que vamos a usar, dejando la piel transparente de los gajos, y quitando muy bien la parte blanca.
Trocear las naranjas acabando de quitar la parte blanca de dentro.
Pesar la naranja que hayamos troceado y preparar el azúcar y el agua en las cantidades requeridas.
Poner en una olla las naranjas troceadas con la tercera parte del azúcar, tapar y dejar en sitio fresco hasta el día siguiente.
Al día siguiente, escaldar tres veces las pieles de naranja durante tres o cuatro minutos, cambiando el agua cada vez. Reservar
Poner la cazuela al fuego, llevar a ebullición removiendo de vez en cuando. Cuando empiece a hervir dejar a fuego lento.
En un principio debe de hervir a unos 100 grados, temperatura que irá subiendo según se vaya evaporando el líquido, habrá que mantener en ebullición hasta que veamos que la temperatura llega a 105ºC.
Cuando empieza a hervir veremos que la pulpa de la naranja sube y se queda toda en la parte de arriba.
En el momento en que la pulpa esta casi cocida, se va haciendo una mezcla homogénea. Añadir el resto del azúcar que tenemos reservado y las pieles de naranja escurridas.
Esperamos a que la temperatura de ebullición llegue a 105ºC, y ya podemos considerar que la mermelada está hecha.